El estado Miranda se impuso ampliamente en el Campeonato Nacional Adulto de Atletismo, que se disputó en la recién construida pista de la Universidad de la Fuerza Armada y marcó el regreso del deporte rey a la actividad, luego de más de ocho meses de pausa debido a las medidas sanitarias para frenar el avance del coronavirus.
Miranda reinó en la clasificación global con 286 puntos, por delante de Guárico (151), Distrito Capital (145), Anzoátegui (93) y un Carabobo muy lejos de su nivel habitual (76,50 m). El dominio de Miranda incluyó el triunfo en la tabla masculina, con 134 unidades, a escasos 17 de Distrito Capital, y en la femenina, triplicando a Carabobo, con 152 puntos, sobre los 54 del segundo lugar que ocuparon los centrales.
Cuatro atletas que se encuentran en la franja de clasificación olímpica vieron acción, con saldo dorado. Se trata de Génesis Romero en 100 m con vallas, Lucirio Garrido en los 800, Eure Yánez en el salto alto y Ahymara Espinoza en el impulso de bala.
Romero marcó 13.80 segundos, un tiempo respetable para una atleta que sufrió el robo de todo su material deportivo, que se encontraba entrenando a media máquina por problemas de traslado y que venía, al igual que la mayor parte del resto de los competidores, de nueve meses sin competencia.
“Me sentí bien, eso me indica que estoy en buenas condiciones para emprender la temporada europea bajo techo, donde voy a hacer 60 m con vallas para afinar mi forma”, comentó la carabobeña, semifinalista del Mundial de Doha el año pasado.
Lucirio Garrido se mostró recuperado de una lesión en los isquiotibiales que afectó su retorno en agosto pasado en Puerto Rico, y dominó los 800 con 1:51.18, por delante de los distritales Ryan López y Sebastián López, quienes venían de encabezar, en ese orden, los 1500 m en la primera jornada.
“Lo más importante de todo es que estoy sano, me sentí cansado, me pegó el viaje desde Puerto Rico, pero no tuve molestias, y eso es positivo”, destacó el guariqueño Garrido, quien recibió el oro de manos de su padre, el mítico fondista del mismo nombre.
El mirandino Eure Yánez, en cambio, sí acusó recibo de la larga inactividad, y sintió una molestia en el tendón de la corva que lo frenó en 2,05 y le impedirá participar en el Memorial Brígido Iriarte y en el Asnoldo Devonish.
Otra mirandina, Ahymara Espinoza, no pudo acercarse a sus mejores marcas, y ganó la bala con 16,60 m, pero salió con la convicción de que el fin de semana será más positivo.
“La prueba fue adelantada y no me dio tiempo de calentar mucho”, explicó Espinoza, quien regresó en septiembre pasado de Eslovenia, donde entrenaba desde febrero junto a la también lanzadora Rosa Rodríguez.
“Solo pude hacer dos competencias porque apenas llegamos a Eslovenia comenzó el confinamiento por el coronavirus, pero a veces entrenábamos a escondidas”, relató. “Fue un tiempo difícil en el que nos tocó hasta barrer las hojas de los árboles cerca del hotel para poder pagar nuestra estadía, pero contamos con una gran solidaridad del entrenador Vladimir Kevo, que prácticamente nos adoptó, porque nosotras viajamos con recursos propios”.
El ministro de Juventud y Deporte, Mervin Maldonado, se encargó de inaugurar el evento, que se disputó en honor del decatlonista Pelayo Quintana, fallecido hace cinco años.
“Después de más de ocho meses de inactividad, hemos demostrado que con apoyo podemos rendir, pero necesitamos con urgencia que se atienda la situación de las pistas en todo el país, para que sigamos creciendo”, destacó el presidente de la Federación Venezolana de Atletismo, Wilfredys León.
El ministro Maldonado pidió un aplauso para los más de 200 atletas de 18 estados que se dieron cita en el Nacional. “Venimos de mucho tiempo en el que las actividades deportivas se han visto afectadas. Hay que dar un reconocimiento a los atletas, a la federación por hacer este Nacional posible, a la Fuerza Armada por prestar el escenario. Se ha podido hacer porque todos hemos puesto nuestro granito de arena, y ahora apostamos a que el próximo año será mejor”, auguró Maldonado.
En otros resultados destacados, el decatlonista Gerson Izaguirre puntuó cuatro veces para La Guaira (oro en la garrocha, plata en los 110 m con vallas y el salto largo, y cuarto lugar en la jabalina), y el olímpico José Peña reapareció con un triunfo en una final de 3000 m con obstáculos que corrió prácticamente solo, y que resolvió con 9:25.79, 45 segundos menos que su más cercano perseguidor.
El Campeonato Nacional observó todas las medidas de bioseguridad para evitar la programación del COVID-19: todos los asistentes llevaron mascarillas de forma permanente, salvo al momento de la competencia, usaron gel antiséptico, respetaron el distanciamiento social y se practicaron pruebas de despistaje previamente.
En el evento estuvo presente también el vicepresidente de la FVA, Marcos Oviedo, quien es a su vez presidente de la Asociación Panamericana de Atletismo, y destacó el hecho de que los atletas hubieran tenido un escenario para buscar los puntos de clasificación olímpica.
“El 1º de diciembre se reanudó el periodo para hacer marcas mínimas y puntos para el ranking, que estaba congelado desde abril, y agradecemos mucho haber contado con la autorización del ejecutivo para realizar tanto este Nacional como los Grand Prix Suramericanos, que son los únicos que pudieron disputarse este año, porque les da a nuestro atletas la posibilidad de sumar puntos de cara a Tokio 2020”, comentó Oviedo.
Este sábado a las 3 pm se celebra el Memorial Brígido Iriarte y el domingo el Asnoldo Devonish, ambos en la pista de Fuerte Tiuna, y el martes tendrá lugar en Barquisimeto el Grand Prix Máximo Viloria.